¿Qué son los implantes dentales?
Los implantes dentales son aditamentos, un tipo de raíces artificiales creadas para sustituir dientes ausentes o pérdidas por cualquier causa. Son capaces de integrarse hasta el punto de convivir de manera sana y totalmente natural con el resto de tejidos de la boca. Actualmente, se suelen fabricar de titanio químicamente puro y son sustitutos de las raíces dentales. Después de colocarlos adentro del maxilar o de la mandíbula, una vez osteointegrados, sirven para apoyar a los nuevos dientes artificiales que se unirán.
Como ya hemos comentado, cada implante hace de raíz artificial sobre la cual se asienta la corona o prótesis dental. Podemos distinguir, igual que en cualquier diente:
- Fijación implantológica o implante dental (porción que queda bajo la encía)
- Pilar transepitelial (porción de la fijación que emerge de la boca)
- Corona o prótesis (que recubre al pilar y es apreciable en la boca)
¿Cómo se sujeta el implante dental al hueso?
Por medio del que el profesor Bränemark, describió a los años 50 como osteointegración, un proceso biológico mediante el cual el organismo establece una conexión directa entre el hueso y la superficie del implante.
Cuando se ha producido la osteointegración, el implante se encuentra firmemente unido en el hueso y puede soportar una prótesis para afrontar todos los requerimientos funcionales y estéticos como si fuera un diente natural sano.
Otra característica de la osteointegración es que es muy estable a lo largo del tiempo. Por lo tanto, estos tratamientos ofrecen resultados satisfactorios que se disfrutan durante muchos años.
¿Para qué sirven la implantología dental?
Optamos por la implantología dental o colocación de implantes dentales cuando se pretende:
- Reponer dientes con estabilidad similar o incluso superior a la de los dientes naturales perdidos, evitando utilizar dientes adyacentes. Rehabilitar la boca de manera funcional y estética con calidad y precisión.
- Obtener un anclaje para las prótesis dentales móviles que aporte la estabilidad necesaria para dar confort y seguridad, como si fueran prótesis fijas.
- Conseguir que el hueso de los maxilares mantenga su función y no pierda volumen por reabsorción. De este modo se evita el deterioro de los tejidos y el aspecto de cara envejecida por formación de pliegues y arrugas.
- Posibilitar anclajes que permitan efectuar otros tratamientos —como los ortodónticos o ortopédicos— que, si no, a veces serían imposibles de hacer.
¿Cómo puedo restaurar el diente aislado que me falta?
Mediante un implante dental puede ser rehabilitada la pérdida de un diente natural SIN NECESIDAD DE UTILIZAR O CORTAR los dientes adyacentes sanos. Aun así, esto es inevitable si se opta por colocar un puente apoyado en los dientes.
Se adapta una corona unitaria o independiente sobre el implante, que puede ir cimentada o unida mediante un pequeño tornillo escondido. Con esto, la apariencia natural y las funciones masticatorias y de fonación quedan totalmente restauradas sin tener que apoyarnos en dientes adyacentes.
¿Cómo puedo restaurar la carencia de varios dientes seguidos?
Cuando se han perdido varios dientes, ya sean anteriores o posteriores, y el tramo sin dientes es pequeño, se pueden reponer las ausencias mediante una prótesis fija denominada puente, que puede ir apoyada en los dientes naturales. Pero si se quiere evitar cortarlas, es más aconsejable poner varios implantes en el tramo sin dientes y, sobre ellos, apoyar al puente.
En caso de que, a pesar de haber dientes naturales, los vacíos sin dientes sean tan grandes que no se aconseje colocar un puente apoyado en los propios dientes del paciente, tendrá que escoger entre una prótesis removible con ganchos, retenedores e incluso paladar, con la correspondiente aceptación de los inconvenientes que comporta este tipo de prótesis, o bien optar por colocar varios implantes para soportar los puentes. En general, hoy en día los implantes son la opción más aconsejable.
¿Cómo puedo rehabilitar la boca cuando me faltan todos los dientes y las muelas?
La rehabilitación bucal de alguien que ha perdido todos los dientes se puede hacer mediante una prótesis completa removible. Estas “dentaduras completas” pueden presentar una serie de inconvenientes con el paso del tiempo, como por ejemplo:
- Pérdida de estabilidad, ajuste y retención que ocasiona movilidad, dificultad masticatoria e inseguridad.
- Reabsorción lenta pero continuada del hueso alveolar de los maxilares.
- Llagas en zonas de roces.
- Pérdida del gusto y cambios en el sabor de los alimentos.
- En algunas personas producen náusea lo que dificulta su uso.
Estos problemas, y la necesidad de efectuar revisiones frecuentes, se tienen que tener en cuenta a la hora de decidir el tipo de rehabilitación. Mediante la colocación de un número variable de implantes dentales, que dependerá de cada caso en particular, se puede adaptar una prótesis estable, parar la reabsorción del hueso en los maxilares e incrementar el confort y la seguridad.
En este caso se puede optar por una prótesis completamente fija, que sólo puede ser retirada por el dentista, o por una sobredentadura, que asegura una estabilidad y un confort total cuando está colocada, aunque el paciente la pueda desmontar.
¿Quién me puede asesorar?
Seguramente, la primera información sobre implantes se la habrá facilitado el periodoncista, que está totalmente capacitado para hacer el diagnóstico y plantear las alternativas terapéuticas.
El conjunto de profesionales que intervienen para restablecer la salud bucal mediante tratamientos con implantes dentales recibe el nombre de equipo implantológico.
Confíe en su dentista y en los componentes del equipo implantológico, con el convencimiento que tanto para informar como para conseguir un resultado estético y funcional óptimo, hace falta que estos profesionales se coordinen y reciban la ayuda inestimable de un numeroso grupo de colaboradores altamente calificados, entre los cuales hay que destacar los radiólogos, higienistas, auxiliares dentales y técnicos de laboratorio dental. Todos lo ayudarán a mejorar la salud y el bienestar.
¿Es molesto, el tratamiento con implantes dentales?
Los procedimientos quirúrgicos del tratamiento de implantología dental están muy bien protocolizados y normalmente no causan mucho o nada de molestia.
La gran mayoría de casos se hace con anestesia local, igual que otros muchos tratamientos odontológicos. Sólo se percibe el ruido de los instrumentos y sensaciones de presión o palpitación en la zona. En caso de que el paciente lo desee, se puede realizar bajo sedación consciente.
Durante el post-operatorio, cuando cesa el efecto de la anestesia puede aparecer una pequeña molestia, aunque ocasionalmente podría ser más intensa.
Sólo algunas personas con una predisposición especial pueden sufrir inflamación de la zona operada y hematoma, habitualmente a partir de las 24 horas de la intervención. Estos fenómenos no representan ningún problema y son el reflejo de la reacción reparadora de los tejidos después de la intervención.
¿En qué consiste el tratamiento con implantes dentales?
El procedimiento es diferente en cada caso y tiene que ser personalizado. Su equipo implantológico le informará con detalle.
Habitualmente incluye:
- Fase inicial de estudio y planificación
- Una o varias actuaciones durante la fase quirúrgica
- Fase restauradora
- Fase de mantenimiento
¿En que consiste la fase inicial de estudio y planificación del tratamiento?
El tratamiento con implantes dentales osteointegrados requiere procedimientos de una alta complejidad técnica. Por lo tanto, tiene que estar muy planificado, y el estudio se tiene que llevar a cabo en una o varias visitas con el objetivo de:
- Facilitar información de los implantes o del tipo de prótesis indicada, si procede.
- Ayudar a elegir la época ideal para efectuar el tratamiento, dado que en algunas fases puede alterar el ritmo de vida del paciente. La fase de estudio es el momento ideal para planificarlo todo.
- Valorar individualmente el estado de salud bucal y general del paciente para conocer posibles riesgos o contraindicaciones del tratamiento.
- Ofrecer al paciente un plan de tratamiento con la información de los procedimientos clínicos que se le practicarán.
- Recuperar la salud integral orientando sobre otros tratamientos que pueda necesitar odontológicos (periodontales, restauradores, endodónticos, articulares…) o generales.
Durante la fase de estudio, el equipo implantológico lo asesorará sobre los tratamientos necesarios previos o posteriores al tratamiento implantológico.
¿Puedo colocarme los implantes en el momento de sacarme los dientes, o tengo que esperar?
Depende de la causa de la pérdida de los dientes. Si la pérdida se ha producido sin infección y con una cama ósea sana o no alterada, es posible.
En caso de haber infección o haberse producido alteraciones de la calidad o cantidad del hueso, se aconseja esperar un tiempo porque la cama ósea que recibirá el implante se normalice. Sino, se puede comprometer la fiabilidad del tratamiento. En estas situaciones, cuando el caso lo requiera por necesidades estéticas o funcionales, se puede confeccionar una prótesis provisional, fija o removible que le permita soportar el tiempo de espera con comodidad.
La duración del periodo de espera dependerá de cada paciente. El equipo implantológico le podrá avanzar, incluso antes de la extracción, una duración aproximada.
¿Cómo es la fase quirúrgica?
Hacen falta una o varias intervenciones quirúrgicas para preparar la cama ósea antes de instalar los implantes. En algunas ocasiones hay que hacer técnicas regenerativas para poder poner el implante completamente rodeado por hueso y darle la estabilidad que requiere.
Dependiendo de cada caso, esta colocación se puede hacer en uno o en varios actos quirúrgicos:
- Si el procedimiento se hace en dos fases, en la primera se inserta el implante y se lo deja totalmente cubierto por la encía durante un periodo de tiempo variable. En la segunda fase, generalmente unas cuantas semanas después, se hace una pequeña incisión a la encía para comprobar el buen estado del implante y efectuar la conexión del pilar, que queda en contacto con el medio bucal y servirá de unión con la futura prótesis.
- Cuando el implante se coloca en una sola etapa quirúrgica —cosa cada vez más frecuente—, se instala la fijación o el implante y, a la vez, un componente de conexión que queda en contacto con el medio bucal, denominado pilar transepitelial o de cicatrización.
- En casos concretos, en un mismo día se puede hacer el procedimiento quirúrgico y colocar una prótesis dental fija.
La elección de un procedimiento u otro depende de criterios individuales que serán valorados por el equipo implantológico.
¿Cuando puedo necesitar procedimientos quirúrgicos especiales?
Aunque los implantes casi siempre se hacen siguiendo el procedimiento descrito anteriormente, a veces hay casos en que las alteraciones en la calidad o cantidad del hueso o de la encía requieren técnicas para resolver estos problemas.
Estos procedimientos emplean injertos del mismo paciente o de materiales sintéticos, y quieren incrementar la cantidad y calidad del tejido del paciente en la zona que tiene que ser intervenida. De este modo, se pueden colocar implantes en pacientes que, sino, no los podrían recibir por deficiencias en su anatomía.
¿Qué cuidados tengo que hacer después de la colocación de los implantes durante el periodo de osteointegración?
Uno de los requisitos para conseguir la osteointegración es la necesidad que el proceso se produzca sin interferencias externas. Algunos de los factores que pueden perjudicar este proceso son los siguientes:
Las infecciones
Los pacientes con una higiene bucal descuidada, sobre todo quienes sufren enfermedades periodontales (piorrea), tienen mayor riesgo de sufrir contaminaciones bacterianas de los implantes.
Las cargas sobre los implantes
A menudo, las fuerzas aplicadas sobre los implantes durante la osteointegración pueden interferir en el proceso normal de integración entre implante y huesos. Este riesgo es máximo en las personas que, durante este periodo, llevan prótesis provisionales apoyadas sobre los mismos implantes o sobre la encía que los recubre.
El hábito de fumar
Los fumadores tienen más riesgo de sufrir complicaciones porque los elementos nocivos del tabaco afectan el proceso normal de osteointegración. De hecho, la mayoría de las complicaciones de los tratamientos con implantes dentales se producen en pacientes fumadores.
Evitar estos factores de riesgo depende de usted; su equipo implantológico le aconsejará cómo hacerlo. Siga las instrucciones y acuda a las revisiones que establezcan para el control adecuado de su caso.
¿En que consiste la fase restauradora o de colocación de la prótesis?
Es la etapa del tratamiento en que se colocan los dientes sobre los implantes adaptando coronas, puentes u otras prótesis. Se lleva a cabo cuando se ha verificado, mediante procedimientos específicos, que la osteointegración es adecuada y que los implantes y tejidos que los rodean están preparados para recibir fuerzas.
Esta fase requiere un número variable de etapas, con visitas dirigidas para asegurar la integración funcional y estética total de los nuevos dientes en el conjunto de las estructuras bucales y faciales, y es tan importante como la quirúrgica.
Es imprescindible que los integrantes del equipo implantológico encargados de la prótesis (el dentista restaurador y el técnico en prótesis dental a cargo del laboratorio) se compenetren bien.
A veces, los requerimientos de adaptación a la nueva situación estética y funcional son complejos, y se tienen que alargar bastante hasta que se consigue una restauración óptima. Entonces puede ser necesario traer prótesis provisionales que, en todo caso, permitirán una función y una estética razonable.
En nuestro centro disponemos de sistemas digitalizados de toma de medidas de su boca para la realización de las prótesis, que le evitarán tener que soportar las pastas en la boca que tanta incomodidad producían.
¿Cuánto de tiempo tengo que permanecer sin prótesis durante el tratamiento?
Dependerá de cada caso.
Muchas veces no hay compromiso estético o funcional, y puede ser que no haga falta ninguna prótesis provisional durante la fase de osteointegración.
Sin embargo, si su caso lo requiere, se puede volver a adaptar una prótesis provisional inmediatamente después de haber finalizado la fase quirúrgica.
Muy pocas veces tendrá que permanecer unos días sin ninguna prótesis por el riesgo que pueda interferir con el proceso de cicatrización y favorecer la infección y las complicaciones terapéuticas.
Si se puede rehabilitar el paciente con una conexión inmediata de la prótesis a los implantes el mismo día de la intervención, sólo permanecerá unas horas sin la prótesis. En este caso, la actividad normal se recuperará muy pronto.
Después de la operación, o incluso antes, el equipo implantológico le indicará la conducta a seguir y le asesorará sobre cualquier otro aspecto necesario para su bienestar, dado que a veces tendrá que introducir algunos cambios pasajeros en su vida laboral o personal.
¿En qué consiste la fase de mantenimiento?
Múltiples estudios de investigación han demostrado que los tratamientos con implantes son muy seguros. Esta seguridad rae en protocolos de control y mantenimiento exhaustivos.
Hay que establecer una vigilancia adecuada y hacer curas periódicas de mantenimiento para evitar contaminaciones bacterianas y los posibles desajustes de las prótesis por el desgaste que pueden ocasionar el uso y el paso del tiempo.
Con las revisiones de mantenimiento se quiere controlar la evolución de los resultados del tratamiento a lo largo del tiempo, detectando precozmente cualquier situación desfavorable que se pueda producir y actuando en consecuencia. En caso de que no haya ningún problema, que es lo más probable, se ejecutan rutinas diagnósticas y preventivas que el equipo implantológico individualiza en cada caso concreto para garantizar la salud del tratamiento a largo plazo.
¿Los implantes dentales son asequibles?
El tratamiento de implantología dental requiere poner a disposición del paciente procedimientos y medianos materiales con una gran sofisticación técnica. Comportan un coste superior a las alternativas convencionales de prótesis. Además, dependerá de la duración y la complejidad de la rehabilitación necesaria.
Cuando se valora el tratamiento en función de los beneficios obtenidos, la relación coste-beneficio normalmente es más favorable que cualquier otra alternativa.
Si quiere saber el coste, los dentistas que integran el equipo implantológico valorarán la situación y, si lo desea, le harán un presupuesto previo con las diferentes alternativas para asumir el importe. Así, no será ningún inconveniente para recuperar la salud y la estética.
¿Cuánto durará el tratamiento?
Los tratamientos de implantología dental tienen una duración, un confort, una estética, una fiabilidad y una predictibilidad muy superiores a otros tratamientos para sustituir dientes naturales. La investigación sobre las técnicas que han hecho posible la implantología osteointegrada actual empezó el 1965, y hay pacientes que hace más de 30 años que traen prótesis sobre implantes dentales.
Igual que ocurre con el resultado de otros tratamientos odontológicos y médicos, la duración de los implantes y la rehabilitación protésica que soportan, depende en gran medida de las características anatómicas y fisiológicas del paciente y de sus hábitos, así como de la alteración que haya causado la pérdida de los dientes. No se puede ofrecer una estimación general de la vida prevista para los implantes a todos los pacientes.
Después de valorar su caso, el equipo implantológico podrá ofrecerle una estimación aproximada de la duración del tratamiento.
En cualquier caso, hay que saber que los implantes pueden tener complicaciones a medio y largo plazo que pueden hacer que hagan falta tratamientos adicionales y que, incluso en algún caso, haya que retirar el implante. Por lo tanto, hay que entender el tratamiento de implantología dental como una buena alternativa cuando no se posible mantener un diente (o ya se ha hecho la extracción), pero nunca será una opción mejor que mantener el propio diente, si es posible.
¿Puede ser que el organismo rechace los implantes dentales?
La mayoría de implantes dentales están fabricados con titanio quirúrgico, un material que ha demostrado ser biocompatible, bioinerte, estable, con capacidad para integrarse con el hueso (osteointegración) y una muy buena tolerancia entre los tejidos blandos.
Es un metal que no ha exhibido ninguna reacción tóxica ni irritando sobre el tejido vivo. Esto quiere decir que el organismo no lo reconoce como extraño. Por lo tanto, es muy improbable que manifieste cualquier tipo de rechazo a este tipo de material. Hay pocos pacientes con alergia al titanio.
Sin embargo, durante los meses siguiente a la colocación, los implantes pueden sufrir complicaciones que deriven en falta de osteointegración y, por lo tanto, puede ser que se tengan que retirar. Estas situaciones, aún siendo escasas, suelen responder a: infecciones en la zona operada, deficiencias vasculares, alteraciones en los procesos reparativos del organismo —como los que son frecuentes en fumadores— y estrés o sobrecarga funcional en los casos en que los implantes soportan una prótesis.
¿Qué problemas puede causar un tratamiento con implantes dentales?
Sabemos que el 98% de los implantes se integran al hueso después de colocarlos.
Un tratamiento con implantes dentales puede fracasar en etapas iniciales cuando no se integra el implante, generalmente por infecciones o malas condiciones biológicas del paciente. En etapas posteriores, una vez producida la osteointegración, las complicaciones pueden producirse por alteraciones causadas por desajustes o fracturas de la prótesis o de los elementos de unión de la prótesis con los implantes, o por infecciones (peri-implantitis). Si estos problemas se detectan a tiempo y se corrigen, es posible que el implante se mantenga sano. En caso contrario, puede perderse.
Las posibilidades que el tratamiento fracase dependen fundamentalmente de los condicionantes individuales de cada paciente y de sus hábitos de salud e higiene, y del tipo de implante empleado. No todos los implantes de titanio son iguales.
También son trascendentales las circunstancias que puedan tener relación con la planificación y la ejecución global del tratamiento. Por eso es tan importante que se encarguen profesionales con experiencia, formados y al corriente de las novedades científicas.
El equipo implantológico trabajará meticulosamente para procurar prevenir estos efectos no deseados y, además de un adecuado tratamiento quirúrgico y restaurador, le ofrecerá un plan de mantenimiento ajustado a sus necesidades individuales. De este modo, mediante revisiones periódicas se evitará la aparición de complicaciones o, si aparecieran, se conseguirá tratarlas prestamente. Así se asegurará el éxito del tratamiento a largo plazo.
¿Cómo afecta el tabaco el tratamiento de implantología dental?
El tabaco puede influir muy negativamente en los resultados de los tratamientos con implantes dentales, incluso en aquellos casos en que no hay ningún otro factor de riesgo adicional.
Entre los efectos negativos del tabaquismo podemos citar: que disminuye la aportación sanguínea al hueso, a la encía y a la mucosa que lo rodea; que altera las características de los tejidos blandos de la boca; que retrasa la cicatrización y facilita las infecciones de las zonas operadas; y que disminuye la capacidad de reparación de las lesiones, al actuar sobre las diferentes células que intervienen.
Todo esto hace que hoy sepamos que el porcentaje de implantes fracasados en pacientes fumadores es más grande que en no fumadores.
¿Qué complicaciones pueden presentarse durante el tratamiento con implantes dentales?
Siempre que una persona se somete a una intervención quirúrgica, tiene que dar su consentimiento y saber que corre el riesgo que puedan surgir complicaciones no deseadas. En las intervenciones para colocar los implantes también existe este riesgo, pero será mínimo si se estudia y planifica bien su caso. Así, cuando se prevea colocar implantes en el sector posterior de la mandíbula o del maxilar superior, el equipo implantológico valorará la posible relación con estructuras anatómicas a tener en cuenta, como pueden ser el nervio dental —que recorre la mandíbula— o el seno maxilar.
Por eso, antes del tratamiento se hará un estudio minucioso para localizar las estructuras anatómicas que se tengan que respetar, para alejarse o manipularlas conscientemente para poder colocar los implantes preservando la salud general.
¿Qué se hace si se pierde un implante?
A pesar de que es una situación muy poco frecuente, los protocolos terapéuticos incluyen esta posibilidad y tienen prevista una actuación.
Si el implante se pierde antes de colocar la prótesis, se valora la causa de la pérdida, se corrigen tanto la causa como las posibles consecuencias y, si todavía es posible, se vuelve a colocar un nuevo implante.
Si se pierde después de colocar la prótesis, se desmonta la prótesis y habitualmente, se actúa como en el caso anterior.
A veces, los implantes remanentes son suficientes para asegurar la estabilidad de la prótesis, y en estos casos no es necesario reponer el implante perdido.
¿Qué sentiré o percibiré al traer un implante dental?
Lo mismo que con un diente natural.
Algunos pacientes afirman que disfrutan de mayor seguridad y firmeza con los dientes soportados por implantes. Esto permite que el paciente se olvide que lleva un material implantado.
Los implantes dentales osteointegrados permiten sujetar una prótesis dental con tanta firmeza que, cuando se mastica, no se aprecia ningún tipo de inseguridad. Con la prótesis sobre implantes se tiene la sensación que la masticación es parecida a la natural, o incluso más consistente, de forma que se puede desarrollar una fuerza masticatoria similar a la obtenida con la dentición propia, e incluso mayor.
A veces, por alguna circunstancia del tratamiento es imposible colocar un número suficiente de implantes para anclar del todo la prótesis, y hay que poner un tipo de prótesis «semi-fija» llamada sobredentadura. A pesar de que se mueve un poco, permite obtener una gran estabilidad y unos niveles de aceptación muy superiores a los de una prótesis convencional.
¿Qué ritmo de vida tengo que traer durante el tratamiento con implantes dentales?
El día de la intervención, después del tratamiento quirúrgico, puede encontrarse un poco cansado. Normalmente es a consecuencia de haber estado pensando en la operación. No se preocupe. Repose en casa y procure relajarse y distraerse. El resto de los días posteriores a la operación, y hasta que se le retiren las suturas, puede hacer vida normal, pero evitando fatigarse en exceso.
En caso de tener que hacer técnicas regenerativas o bien elevaciones sinusales, por favor, consulte las precauciones con el periodoncista.
La fase restauradora, mientras se hacen las prótesis, no suele necesitar ninguna precaución especial.
El equipo implantológico le detallará todo el que haga falta porque su vida continúe con un ritmo normal. Siga escrupulosamente sus consejos de alimentación, curas y medicación.
Tenga siempre a mano los teléfonos de la clínica para consultar cualquier duda.
¿Los implantes dentales me producirán mal aliento?
Los implantes dentales, en sí mismos, no producen mal aliento. Si tuviera (halitosis de origen oral), seguramente sería por culpa de una higiene deficitaria, la gingivitis, la periodontitis (piorrea), o bien la presencia otras infecciones en la cavidad bucal.
Es muy importante mantener una higiene oral meticulosa de todas las estructuras de la boca: lengua, encía, dientes naturales, implantes y prótesis instaladas.
La salud de la boca, la fiabilidad de los tratamientos y la ausencia de halitosis están muy relacionadas con el mantenimiento de una higiene oral correcta.
Si las prótesis fueran de las que el paciente se puede extraer, lo tendría que hacer cada día para higienizarlas fuera de la boca.
En el caso de prótesis desmontables sólo en la clínica, se revisarán periódicamente y, cuando se estime necesario, se desmontarán para revisarlas y limpiarlas.
¿Puedo fumar si llevo implantes dentales?
En fumadores, los implantes dentales responden peor. Por este motivo se recomienda no fumar.
No se trata sólo de complicaciones en la cicatrización en la fase inicial de osteointegración, sino también en el desarrollo de peri-implantitis, es a decir, pérdida ósea alrededor del implante a lo largo del tiempo.
Los efectos concretos del tabaco sobre el paciente tratado con implantes son:
- Perjudica la cicatrización y los procesos reparativos tras la cirugía.
- Reduce el aporte sanguíneo en la zona y con ello la capacidad defensiva frente a agresiones microbianas.
- Dificulta el mantenimiento de la salud de los implantes a largo plazo, comprometiendo la duración del tratamiento.
Si usted es fumador, tiene que ser consciente de estos riesgos y comentarlo al equipo implantológico antes de empezar un tratamiento con implantes. Así, ante estos inconvenientes, y si procede, los protocolos de tratamiento y seguimiento posterior serán mucho más rigurosos.
¿La gente notará que llevo implantes dentales?
Una prótesis sobre implantes puede llegar a pasar desapercibida a simple vista, incluso para un profesional dental. A veces, algunos condicionantes anatómicos pueden impedir un resultado ideal, pero su equipo implantológico lo mantendrá informado de las circunstancias particulares que afectan su caso con una aproximación al resultado final.
¿Hay algún inconveniente para hacer un tratamiento con implantes dentales durante el embarazo?
Si está embarazada, es recomendable esperar hasta que pase el parto para someterse a una intervención quirúrgica de implantes dentales.
Si el embarazo acontece cuando ha acabado la fase quirúrgica del tratamiento o cuando ya lleva una prótesis sobre implantes, el desarrollo de su hijo no se verá afectado ni aumentará el riesgo de perder los implantes. Sin embargo, sí que es importante adaptar el plan de mantenimiento peri-implantario personal y profesional a las nuevas necesidades que surjan durante el embarazo, debido a los cambios fisiológicos y hormonales que experimentará su cuerpo.
¿Se pueden colocar implantes en un paciente diabético?
La diabetes es una enfermedad metabólica que altera ciertas funciones del organismo; por ejemplo, la capacidad de respuesta a las infecciones. No es aconsejable colocar implantes en pacientes con descontrol de la enfermedad. Ahora bien, cuando la diabetes está controlada, el paciente puede responder de manera normal, con buenos resultados y sin complicaciones.
Aún así, en estos pacientes es conveniente que el protocolo de evaluación previo al tratamiento y de control posterior sean más exhaustivos.
¿El paciente con tratamiento anti-coagulante requiere alguna atención especial?
En estos casos es recomendable que, antes de la cirugía, se hagan actuaciones concretas para normalizar los niveles de coagulación o agregación plaquetaria. Habrá que hacer la interconsulta con su médico para valorar los efectos de la descoagulación en el procedimiento quirúrgico.
Una vez colocados los implantes, el paciente puede volver a la situación previa a la cirugía, y es perfectamente compatible mantener niveles de anti-coagulación terapéutica en el paciente ya tratado con implantes.
Ante cualquier duda, igual que en toda enfermedad sistémica o general, es conveniente preguntar a su médico por si existiese algún inconveniente o se debiera tomar alguna medida precautoria.
¿Se pueden colocar implantes en pacientes con osteoporosis?
La osteoporosis es una enfermedad que afecta la calidad de los huesos, y la osteointegración es un proceso que depende de la calidad ósea inicial. Por lo tanto, en principio no es una contraindicación absoluta, dado que modificando el protocolo terapéutico se logran resultados similares a los que se obtienen con personas sin osteoporosis.
En estos casos, se aconseja hacer una valoración específica del caso y que la decisión sobre el tratamiento la tomen conjuntamente el equipo implantológico y el especialista encargado de la enfermedad ósea.
Es importante que el periodoncista sepa si toma medicación por la osteoporosis, algunas medicaciones pueden complicar la cicatrización post-quirúrgica.
¿Al pasar por un detector de metales, suena la alarma?
Los implantes dentales no emiten ninguna señal al pasar por los sistemas de detección de metales que se suelen poner por razones de seguridad en bancos, puertos, estaciones de tren, aeropuertos y numerosas instituciones.
No hay que decir nada a nadie al pasar por los arcos detectores de seguridad. No detectarán que trae implantes.
¿Los implantes dentales se sacan y se ponen?
Una vez que los implantes están integrados al hueso, la unión es tan firme que no se pueden sacar salvo casos de extrema necesidad, en que se aplican técnicas quirúrgicas especiales denominadas «de rescate».
Lo que sí que se puede sacar y poner es la prótesis sobre los implantes. En algunos casos lo puede hacer el mismo paciente, y en otros sólo el profesional.
¿Hay edad límite para hacer un tratamiento restauradorcon implantes dentales?
No existe una edad máxima para colocar implantes dentales. La única limitación es el estado de salud de cada uno. Nuestro equipo le indicará las pruebas necesarias para verificar que su salud general permite efectuar un tratamiento con implantes.
La edad mínima para colocar implantes dentales depende de que haya finalizado el crecimiento. Cuando una persona ha finalizado su desarrollo, estará en condiciones de disfrutar de las ventajas de los implantes dentales. Antes no es recomendable.
El crecimiento no acaba siempre a la misma edad. Le podemos asesorar sobre las pruebas específicas que hacen falta para diagnosticar el fin del crecimiento.
¿El tratamiento hace daño?
No, siempre se hace con anestesia local y, a veces, con sedación.
Con la mayoría de los pacientes basta con aplicar anestesia local para evitar cualquier molestia. Aun así, si hace falta, el equipo implantológico puede aumentar su bienestar mediante medicamentos relajantes o aplicándole técnicas de sedación consciente.
Desde el comienzo del estudio, durante todo el tratamiento y una vez finalizado, cuando descanse en casa, todo el equipo evitará que tenga molestias. Si escucha y sigue sus consejos, el post-operatorio transcurrirá sin problemas.
Para estar tranquilo, tenga siempre a mano el teléfono de la clínica para poder comunicar cualquier duda o problema que le surja.
¿Se pueden colocar implantes dentales en pacientes que sufran una enfermedad periodontal?
Los pacientes que conservan algún diente natural y sufren una periodontitis activa corren el riesgo que las bacterias responsables de la enfermedad periodontal infecten los implantes colocados y dañen progresivamente el hueso y la encía a su alrededor.
Como resultado de esto, se puede producir una PERIIMPLANTITIS, es decir, una infección alrededor de un implante dental que comprometerá la supervivencia y que, si no se trata correctamente y a tiempo, puede ocasionar la pérdida.
Quién sufra algún tipo de enfermedad periodontal puede recibir un tratamiento con implantes dentales, siempre que la enfermedad periodontal haya sido tratada antes. Una vez el paciente esté periodontalmente sano y cumpla con sus citas de tratamiento preventivo, podrá someterse al tratamiento de implantes dentales.
Como las periodontitis son enfermedades crónicas con posibilidad de recidiva, los pacientes que las hayan sufrido —en cualquiera de sus variantes—, y que tengan dientes naturales e implantes, requerirán una vigilancia especial, con revisiones y mantenimientos periódicos.
¿Cómo puedo saber si sufro una enfermedad periodontal?
Usted puede sospechar que sufre enfermedad periodontal en los siguientes casos:
- Sangrado de las encías (normalmente no se aprecia en fumadores).
- Enrojecimiento o inflamación de las encías.
- Retracción de las encías (encías mermadas o dientes más largos).
- Presencia de sarro o excesiva acumulación de placa dental.
- Halitosis (mal aliento).
- Separación progresiva de los dientes.
- Movilidad o pérdida de dientes.
En cualquier caso, la sintomatología acostumbra a ser mínima, por lo tanto siempre está indicada la evaluación por parte del periodoncista.
Los problemas periodontales son muy frecuentes, pero en general tienen buen pronóstico cuando se tratan bien. Sabemos que el porcentaje de la población que sufre algún tipo de gingivitis o periodontitis llega al 96%, y las más graves afectan el 22% de la población.
Toda la información editada por la Sociedad Española de Periodoncia y Osteointegración, la SEPA, se puede acceder por internet en www.sepa.es.
Si pierdo los dientes por enfermedad periodontal, es aconsejable que las reponga mediante implantes dentales?
Sí, el tratamiento con implantes dentales es una buena manera de rehabilitar los dientes perdidos en un paciente periodontal.
Los implantes dentales sustituyen las raíces de dientes perdidos para poder colocar una prótesis dental de manera firme, estable y que transmita las fuerzas de la masticación al hueso, lo cual estimulará su metabolismo y evitará que el hueso de los maxilares mengüe progresivamente y envejezca las facciones de la cara. Además, al dotar la boca de dientes implantados fuertes disminuiremos el esfuerzo de los dientes naturales que se mantengan y no sobrecargaremos soportando fundas o aparatos. Sin duda esto hará que se conserven más tiempo e incrementará la calidad de vida.
Antes de nada, tenemos que procurar mantener sanos los dientes naturales cuidándolos desde pequeños. Con todo, si los tuviéramos que sustituir, hoy en día los implantes osteointegrados son la solución ideal. Pueden ser su tercera dentición.