Si me cepillo bien los dientes, no tendré enfermedades en encías. ¿Verdad o mentira?

Si me cepillo bien los dientes, no tendré enfermedades en encías. ¿Verdad o mentira?

Un buen cepillado puede no ser suficiente

22 de octubre de 2018

Con frecuencia visitamos a pacientes que no entienden cómo pueden tener enfermedades de sus encías si se han cepillado toda su vida los dientes con regularidad, y las personas con las que conviven incluso les han tachado de ser unos maniáticos de la limpieza bucal.

Las enfermedades de las encías, tanto la gingivitis (inflamación de las encías sin pérdida ósea de alrededor del diente) como las periodontitis (cuando ya hay pérdida ósea) son enfermedades inflamatorias que se producen por la acumulación de bacterias (en forma de biofilm) en el margen de las encías.

Entonces, ¿por qué con un buen cepillado no es suficiente?

Necesitamos eliminar el biofilm de alrededor de todo el diente. Y con el cepillo conseguimos eliminar como máximo un 60 por ciento del biofilm de la superficie dental;  se debe a que los cepillos de dientes manuales o eléctricos  no son capaces de limpiar entre diente y diente. Por tanto, el cepillado debe completarse con el uso de seda dental o cepillo de interdentales. Elegimos uno u otro sistema en función del espacio que queda entre los dientes a nivel de las encías. No se ha visto que tengan utilidad los cepillos interdentales eléctricos, por lo que descartamos totalmente su uso.

Quizás hayas oído hablar de los irrigadores bucales o «duchas bucales». Estos aparatos son útiles para eliminar los restos de alimentos que quedan en la boca; sin embargo, no son suficientemente eficaces para eliminar el biofilm bacteriano porque tiene la capacidad de adherirse a la superficie del diente.

Por ello, si le gusta usar un irrigador, le recomendamos que lo use como complemento de higiene antes del cepillado dental y de la higiene interdental, pero nunca como substituto. En caso de usarlo, recuerde que debe colocar el terminal perpendicular al espacio que queda  entre diente y diente, y por difusión llegará al resto de la boca.

La mejor prevención de las enfermedades de las encías es la eliminación del biofilm bacteriano que se encuentra junto a las encías, alrededor de todo el diente.

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